Por: Profr. Fernando Álvarez Montoya
A título personal.
A espaldas, a hurtadillas como los ladrones el Comité Ejecutivo Nacional del SNTE hizo a modo el Reglamento para la Elección de Directivas Seccionales del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación. Sin negar su origen, fieles a su historia y trayectoria charril. Vemos como la dirigencia nacional espuria no tiene la mínima disposición de aceptar una transformación profunda que democratice la vida del SNTE. No ven, no oyen, no escuchan. Cinismo y sordera ante los justos reclamos del magisterio nacional, disidente y democrático de construir un auténtico sindicato que vaya en pos de la defensa a ultranza de nuestros derechos laborales. Ausentes, pretenden desconocer que las reglas de su juego sucio e inmoral han cambiado. Que deben de ajustarse las normas a los nuevos principios de legalidad y transformación que otean en el país.
Dirigentes caciques que – notienennilamenoridea – el daño inmenso que le han hecho al Sistema Educativo del país. El enorme desaseo y corrupción que permea en C.E.N. del SNTE y en las diferentes secciones sindicales ha permeado la vida colectiva de la inmensa mayoría de los maestros. Grupos caciquiles, auténticas mafias que se han enquistado desde la fundación del SNTE no han permitido -(ni pretenden permitir)- que la legalidad la trasparencia y la democracia tenga presencia en la vida interior del SNTE.
No solo es difícil, es harto difícil poder incidir y transformar la realidad político – sindical que se avecina. El primer gran candado no es un Reglamento amañando y a modo que les permitirá seguir usufructuando nuestros bienes y enriqueciéndose con los miles de millones de pesos que quincenalmente aporta el magisterio nacional. Somos, los maestros los que hemos puesto el primer gran obstáculo que como pesada loza no hemos podido sacudir: Nuestras ndiferencias.
La primera gran tarea urgente y necesaria es unir nuestras diferencias para que la pluralidad y la diversidad tengan presencia y eco en un enorme movimiento del magisterio estatal. Urge ya una acción transformadora que una a todos los grupos en lo que nos es común. El único afán que perseguimos: Rescatar el SNTE nacional y la Sección 42 de los grupos caciques y charros traidores.
Pero qué hacer ante este avasallamiento? La tarea es enorme y el propósito es la UNION. Solo así, si lo logramos podremos aspirar al triunfo. Difícil si, pero no imposible.
Agregaré que esto fue lo que hicieron, los sinvergüenzas sin tapujos. Se quedaron con el árbitro, la bola, el campo y el equipo listo para el juego. Sin piso parejo, en un ángulo de 30ᵒ y esta abertura les favorece, están arriba. Triquiñuelas y trampas que hemos de vencer con: Unidad, Unidad, Unidad.
¡Informar! ¡Informar! ¡Organizar! ¡Organizar! ¡Luchar ¡ ¡Luchar!
Mi tarea: Haré llegar el Reglamento por todas las vías a los compañeros adheridos a la secc. 42