Rinden tributo a José Soledad Aycardo, primer payaso de México

Ciudad de México. Pocos creerían que el primer circo de la capital mexicana tuvo lugar en una vecindad de lo que hoy se conoce como la calle de República de Argentina, en el Centro Histórico.

Ahí, José Soledad Aycardo (1821-1887), considerado el primer payaso que tuvo México, fundó el Circo Olímpico.

Un acercamiento a este personaje fascinante es lo que propone El pagliacho, el gracioso de la calle del Relox, que se vuelve a montar, pero ahora en el teatro Julio Castillo del Centro Cultural del Bosque.

Erick Murias, autor de la idea original, afirmó que el payaso se manifiesta en cada lugar. Sus personajes cómicos, su humor y leyendas tuvieron un papel fundamental en el desarrollo cultural de un país. México no fue la excepción, porque existe una tradición desde la época prehispánica que el público desconoce. Contar la historia de uno de estos personajes enaltece nuestro legado cultural y devela los orígenes de nuestro humor tan dicharachero.

Fernando Hondall es el dramaturgo que propone un viaje por el tiempo: un payaso que conoce cada uno de los aspectos que hicieron posible el primer circo en México: el Circo Olímpico, universo mágico, de fantasía y humor que se explora a partir de un antiguo baúl.

El pagliacho, el gracioso de la calle del Relox es una producción del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), que bajo la dirección de Raúl Zamora acerca al público a Aycardo.

Es un homenaje a su persona y humor que permitieron la comedia, las tandas en las carpas y, por supuesto, los patios de maroma en nuestro país, aseguraron los productores.

Un visionario que retó a la adversidad

Es una historia que ocurre en un majestuoso circo ubicado en el patio de una vecindad. Contar la trama del primer payaso mexicano es remontarse al pasado y regresar el tiempo para instalarse y conocer al primer empresario en el arte circerse, desconocido por muchos, pero que, sin duda, fue todo un visionario que se arriesgó a pesar de la adversidad, destacó Murias.

Para recrear este tiempo de circo se contó con la asesoría literaria e histórica del investigador Sergio López, del Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información Teatral Rodolfo Usigli.

El espectáculo El pagliacho…, producción de lNBAL a través de la Coordinación Nacional de Teatro y el Programa de Teatro para Niñas, Niños y Jóvenes 2019, y la Compañía Los Estrouberry Clowns, dura 75 minutos, tiempo en el que niños de seis años en adelante disfrutarán una historia en la que el payaso se manifiesta como un ser extraordinario que invita a viajar con la imaginación y la música original de Mario Alberto Gallardo.

Los Estrouberry Clowns, compañía mexicana de artes escénicas y circenses nació en 2015 y ha montado las obras Vagabundo circo, Cielo nube, Elementto y Cirko de bolsillo, entre otras. Se instalan en los orígenes del circo, cuando el equilibrio y los malabares eran indispensables para hacer reír al público. Ahora, hablan a los espectadores más exigentes: los niños.

Raúl Zamora también es un artista circense que se ha presentado en Francia y España. Ha tenido como maestros a Daniele Finzi Pasca, Anatoli Locachtchouk, entre otros.

El elenco lo integran Jorge Caballero, Dettmar Yañez, María Cappelletti, Nallely Matus, Fernando Hondall, Erick Murias, Víctor Siáñez, José Antonio Lavalle y Yesmin Curiel.

El pagliacho… concluirá temporada el 26 de abril. Ofrece funciones los sábados y domingos a las 12:30 horas. La entrada cuesta 80 pesos y hay descuento a estudiantes y maestros con credencial vigente.

Fuente: La Jornada.