La Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE) informó que los ponchallantas localizados en la carretera Parral–Jiménez no formaron parte de una agresión directa contra corporaciones de seguridad, sino que fueron colocados con la intención de frenar y evadir a las fuerzas del orden; así lo señaló Ángel Aguirre, subsecretario de Estado Mayor de la dependencia.
El funcionario explicó que el hecho se registró el pasado sábado 20 de diciembre durante un operativo conjunto entre la Policía del Estado y el Ejército Mexicano. Al circular por caminos que conectan hacia Jiménez, varias unidades oficiales resultaron con daños en los neumáticos tras pasar sobre artefactos metálicos, sin que se presentaran enfrentamientos ni personas lesionadas.
Ángel Aguirre reconoció que la colocación de los ponchallantas fue deliberada y tenía como objetivo impedir el avance de las autoridades. De acuerdo con la información recabada, quienes dejaron estos objetos buscaban evitar un posible contacto con una célula armada, utilizando la carretera como medio para obstaculizar las labores de seguridad.
Tras el incidente, se solicitó apoyo de la Fiscalía General del Estado y se reforzó la presencia policial en la zona como medida preventiva. El subsecretario indicó que los patrullajes continúan de manera coordinada entre los tres órdenes de gobierno y exhortó a la ciudadanía a reportar cualquier situación sospechosa en esta región del estado.