Chihuahua, Chih.- La directora del Instituto Municipal de las Mujeres (IMM), Mónica Meléndez, llamó a que el debate legislativo en torno a la violencia vicaria se enfoque prioritariamente en la protección de niñas, niños y adolescentes, al considerar que se trata de un sector vulnerable que muchas veces no tiene voz en los conflictos entre adultos. “Me parece que aquí debemos de ponderar y dar mayor relevancia a la perspectiva de infancias”, expresó.
La funcionaria explicó que, aunque el Instituto ha sido respetuoso del proceso que se lleva a cabo en el Congreso del Estado, considera necesario recordar que el interés superior de las infancias debe ser el eje de cualquier reforma. “Siempre tenemos que tener ese enfoque de darle la importancia y la prioridad a este sector tan importante y que muchas veces es vulnerable por la simple condición de que a veces no se les escuche o no se les pueda dar voz a lo que están viviendo o la situación de la que están partiendo”, sostuvo.
Meléndez también enfatizó que, más allá de los marcos legales, es importante fomentar relaciones personales sanas y recurrir a mecanismos como la mediación, especialmente en situaciones de separación o conflicto. “Tenemos que empezar a construir relaciones sanas y puede darse el caso en el que en algún momento la relación no funcione, pero siempre la cordialidad, siempre la mediación es parte fundamental de poder cerrar ciclos, para evitar justamente situaciones que vulneren a los hijos y, sobre todo, que garanticen la integridad de ellos, ¿no? Es particularmente lo más importante”, dijo.
El llamado de la directora del IMM coincide con la discusión legislativa que se mantiene en el Congreso del Estado, donde desde marzo está pendiente de dictamen una iniciativa para reformar la Ley Estatal del Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia y el Código Civil de Chihuahua. Esta propuesta, presentada por la diputada Leticia Ortega, busca tipificar la violencia vicaria como una manifestación de violencia de género, con penas de uno a cinco años de prisión para quienes la ejerzan, y considera también como violencia vicaria el incumplimiento de obligaciones alimentarias.
Según cifras del Frente Nacional contra la Violencia Vicaria, durante 2024 se han registrado cerca de dos mil casos en el estado de Chihuahua. Este tipo de violencia se manifiesta cuando una persona —generalmente el agresor— utiliza a hijas o hijos como medio para causar daño emocional a la madre. Meléndez recordó que desde el Instituto se han acompañado casos similares y que siempre debe prevalecer un principio claro: “Siempre en todo momento es el interés superior de las infancias lo que siempre pondera la toma de decisiones y, sobre todo, como te digo, siempre también sensibilizar porque, al final del día, es el ejemplo de lo que ellos pudieran replicar en el futuro”.