Un potente terremoto de magnitud 7.7 sacudió Indonesia este viernes, causando graves daños en varias regiones del país. El epicentro se localizó en el mar, lo que activó alertas de tsunami en las zonas costeras y llevó a la evacuación de miles de personas.
Las autoridades han reportado al menos 144 fallecidos y más de 700 heridos, mientras los equipos de rescate trabajan contrarreloj para encontrar sobrevivientes bajo los escombros. En varias ciudades, edificios colapsaron y la infraestructura vial resultó severamente afectada.
Las réplicas del sismo, algunas de hasta 6.4 grados, han complicado las labores de rescate y han generado pánico entre la población. Testigos describen escenas de caos, con personas corriendo en busca de refugio y hospitales saturados de heridos.
Videos difundidos en redes sociales muestran el impacto del terremoto, con edificios derrumbándose y carreteras partidas. En las zonas más afectadas, se ha desplegado ayuda humanitaria y fuerzas de seguridad para coordinar la respuesta de emergencia.
Las autoridades han instado a la población a mantenerse alerta ante posibles nuevos movimientos telúricos y han iniciado operativos para evaluar los daños y brindar apoyo a los damnificados.
