La gobernadora Maru Campos Galván lamentó este miércoles que la mesa de negociación entre la Secretaría de Gobernación del Gobierno Federal y los productores del país concluyera sin acuerdos en torno a la reforma de la Ley de Aguas Nacionales, los precios de garantía y los apoyos urgentes para el campo.
La mandataria recordó que, para Chihuahua, el tema del agua es particularmente sensible y que la entidad no cuenta con fuentes alternas de abastecimiento, por lo que pidió a la Federación un trato especial y diferenciado.
Campos subrayó que los episodios recientes, como el conflicto en La Boquilla, demuestran el enorme impacto que las decisiones federales tienen sobre agricultores y ganaderos del estado, quienes —dijo— ya resienten afectaciones severas con la propuesta actual.
“Nos hubiera gustado que alguna de las partes hubiese cedido. Pedimos respeto para Chihuahua y para quienes sostienen al campo”, expresó la gobernadora tras lamentar el estancamiento del diálogo.



