Por: Adán Noé
Si la división se está dando es en todo caso por un Ever Avitia que no tiene el carácter para enfrentar la situación actual, el mismo comité de la Sección 42 duda de su liderazgo y luego sale hipócritamente a defender lo indefendible, sus más allegados saben que mientras se hacían negociaciones importantes (antes del paro) él andaba de compras en el paso.
En sus discursos se oye la indecisión y el temor, aun en los momentos más difíciles siempre tiene cuidado de decir que quien nos estaba aplicando la reforma fue el secretario de educación y no el gobernador, lo cual es una tontería ridícula, quien gobierna es Javier Corral.
El SNTE se está dividiendo porque quien lo encabeza no tiene las tablas para la situación actual, no dudo de su capacidad administrativa pero para tiempo de lucha debería ser honesto consigo mismo y con los compañeros y dimitir.
Tengo el honor de conocer a personas maravillosas dentro del comité de las cuales podría elegirse un nuevo líder que no se haya evidenciado como débil, uno apreciado y respetado por la base que pueda volver a unir lo que se quebró.
Levantar el plantón sin consultar y sin ningún resultado plausible (de promesas nos habían hecho vivir desde el 2013 y es lo único que consiguieron) fue un golpe muy duro a quienes aún tenían fe en el liderazgo de Avitia.
¿Con que autoridad moral podría Avitia convocarnos a una resistencia civil? ¿Quien se atrevería a confiar y sacrificarse nuevamente por alguien que sale con que no se obtuvo nada más que promesas? ¿Quienes seguirían a quien no supo capitalizar tanto apoyo o que ni siquiera supo a quien exigirle nuestras prestaciones?.
El liderazgo de Avitia se lo acabó él solo, la sección 42 somos todos y enhorabuena que hay quienes si se atreven a levantar la voz hacia sus superiores, son ese tipo de personas las que han logrado grandes cambios en diferentes épocas de la historia.