Por: José Luis Rodríguez Chávez
La olla express (presión) rumbo al 2018 está en ebullición. En solo una semana conoceremos los resultados de las elecciones en tres entidades de México (Coahuila, Nayarit y Estado de México). Los pronósticos de estos resultados marcaran rumbo al proceso del año entrante, la joya de la corona el Estado de México.
Andrés Manuel López Obrador gobernó la Ciudad de México al inicio de este siglo. A la par en que Vicente Fox Quezada lograba el triunfo a la presidencia de la república, AMLO lo hacía al gobierno de la capital. López Obrador heredaba del PRD y los antecesores jefes de gobierno esa estafeta, conquistada por Cuauhtémoc Cárdenas en 1997 y continuada por Rosario Robles.
En 2006 y 2012 Andrés Manuel López obrador era derrotado (haiga sido como haiga sido) en sus intentos en la búsqueda por la silla presidencial. Lo mismo que Javier Corral en 2004 en alianza con el PRD-PAN, sucumbía en su intento de gobernar Chihuahua.
Javier Corral Jurado, excelente tribuno reconocido por propios y extraños (diputado local, federal y senador de la república).
Ambos personajes ligados al PRD, sin que sean de izquierda ninguno de los dos. Corral ante las vicisitudes dentro de su partido donde no logro el objetivo de presidirlo a nivel nacional. A diferencia de López Obrador que en su curriculum consta presidir el PRI en Tabasco (1983) y el PRD a nivel nacional (1996-1999).
Constancia, decisión, enjundia, perseverancia son algunos adjetivos que tienen en su formación ambos personajes. AMLO y CORRAL arrogantes y creyentes de su verdad absoluta. Ninguno de los dos cuenta con antecedentes de corrupción. Difícilmente delegan el poder. Involucran a su familia en la desconfianza a su equipo. Y ante la prensa pagada (casos particulares), responden de manera visceral a las difamaciones cobardes en su contra. Con casi tres lustros de diferencia en sus edades.
Andrés Manuel López Obrador, con su discurso sistemático contra la corrupción y las 40 familias poderosas de este país. Javier Corral hace menos de 365 días, logra el triunfo de Chihuahua con la promesa de meter a la cárcel al Cesar Duarte Jaques (antecesor). Ambos discursos contra la corrupción.
A nivel nacional preocupa al sistema que en este tercer intento de Andrés Manuel, logre el triunfo a la presidencia de la republica tan anhelado por el tabasqueño. El PRI de capa caída y sin “sayos” para enfrentar y triunfar en este proceso. El PAN con la caballada flaca, por no decir raquítica para tener un miembro que enfrente con posibilidades de triunfo en 2018.
Sin embargo el sistema siempre tiene “ases” bajo la manga y este podría ser la cárcel para Cesar Duarte Jaques, en los siguientes meses de este 2017. De ser así de manera natural y automática Javier Corral Jurado, se catapultaría a la candidatura PAN –PRD a la presidencia de la república.
Mi pregunta en caso de darse este ejercicio a quien apoyaría Gerardo Fernández Noroña a AMLO o Corral Jurado.