Nueva York.- La octava entrega de Rápidos y furiosos, la cinta que va por un debut de mas de 380 millones de dólares en su primer fin de semana, que abrirá en mercados importantes como China y Rusia, un título que se ve en el mundo con mucho entusiasmo y que comienza hablado en español.
Dominic Toretto y su esposa, Lety, disfrutan de su luna de miel en Cuba, pero como a todo buen héroe el descanso le dura poco.
En las recientes entregas de la saga, Vin Diesel ha sido muy enfático en mantener un elenco multicultural y ha tenido una compañera constante en este esfuerzo, Michelle Rodríguez, hija de padre puertorriqueño y madre dominicana, quien da vida a una mexicana en la cinta y que se siente muy orgullosa de representar a una comunidad que en Estados Unidos ha sufrido duros embates en los últimos meses.
“A mí me encanta representar estos personajes, esta película es una de las pocas cintas que son multicultural y que les da voz en la plataforma de Hollywood a varias culturas. En películas de acción o ciencia ficción de Hollywood no le prestan mucha atención a este mercado, por eso es importante ser parte de la franquicia y asegurar que siga para delante, porque nadie está haciendo lo que hacemos nosotros”, dijo la actriz en entrevista con ¡hey! en Nueva York.
A la serie de cintas de persecuciones se unió recientemente (y con mucho éxito) Dwayne Johnson, el actor mejor pagado de Hollywood y un imán de taquilla indiscutible.
Si bien hace un año dio a conocer un conflicto laboral con Vin Diesel (ya que no coincidía con su forma de trabajar), considera que a pesar de estas dificultades, hay que salir adelante por la audiencia.
“La experiencia de hacer una cinta de Rápidos y furiosos es muy desafiante y tiene sus retos particulares, que no son los más divertidos, pero de cualquier forma ahí está el reto, siempre tienes que pensar 10 pasos adelante, y esos 10 pasos son la audiencia. Hollywood es difícil y hacer películas aún más, es todo un desafío, pero superas todos los retos para que el producto final sea de alta calidad y las audiencias estén felices”, comentó el actor con el tono tranquilo y amable que lo caracteriza.
La Habana es el lugar que comienza un recorrido mundial en la nueva historia, que incluye locaciones como Islandia, Atlanta y Nueva York. Le llegada de la cinta a la isla refleja la nueva historia entre Estados Unidos y Cuba, y ademas lleva a los fanáticos de la saga a sus orígenes.
“Yo estaba brincando cuando Vin me dijo que íbamos a Cuba. El espíritu de esa cultura es tan bello, pero al inicio de la primera película se hizo evidente que Dominic Toretto es cubano y que por eso no se parece a la mayoría de los latinos en California, que en su mayoría son mexicanos. Mi personaje es mexicano”, explicó la actriz, cuyo personaje vivirá la traición de Toretto, eje central de esta nueva entrega de la saga.
Fuente: Milenio