Chihuahua, Chih.- Alrededor de las doce del mediodía y ante el temor de que los antimotines que desalojaron a los inconformes con el gasolinazo en la caseta de Saucillo antes de las 11 de la mañana, los manifestantes contra el gasolinazo que liberaron desde las 10 la caseta Sacramento decidieron levantar la acción. Tal y como sospechaban, a su retirada del lugar a unos metros de la caseta se encontraba una patrulla de la Policía Estatal totalmente repleta de escudos y chalecos, lo cual demuestra que las fuerzas del orden estaban listas para actuar.
Ante las informaciones que llegaban desde Saucillo sobre la intimidación ejercida por las fuerzas de seguridad para levantar la liberación de la caseta, bajo la amenaza de que o los manifestantes desistían de su acción o iniciarían con las detenciones, tantas como les fuera posible, ante el temor de que los agentes fueran caseta por caseta con la misma amenaza, los inconformes suspendieron la protesta tras dos horas, dando por cumplido el acuerdo estatal.
El miedo no fue en vano, ya que en el estacionamiento antes de ingresar al área de descanso del kilómetro 31 se encontraba una patrulla cuya zona de carga se hallaba totalmente repleta de escudos y chalecos, siendo resguardada por un elemento que no dudó en taparse el rostro al ver que iba a ser fotografiado.
De este modo, los manifestantes no quisieron dar lugar a un nuevo acto de represión o intimidación policial, que hubiera sido el tercero de la jornada tras el desalojo en la mañana de los inconformes con el gasolinazo de la región noroeste que bloqueaban las instalaciones de Pemex y el de los 40 compañeros de Saucillo.
