Por: Urbano Nabor Fuentes Lozano - Claro Franco
Recientemente intenté volver a mis épocas de luchador social y se me ocurrió ir a hablar con Maru Campos. Escuchando las palabras de mis amigas de la tercera edad quienes presumían de ser sus amigas. En la torre, que los guaruras me las madrean, bueno pues aprovechando el viaje nos pasamos con los diputados para entregar la petición de rescate de la música tradicional de Chihuahua y sin ser invitada a la fiesta de manera oportunista me abordo la diputada Lily Ibarra, haciendo gala de prepotencia y de grosera, de fracasado no me bajo y me arrebato el escrito dirigido al Honorable Congreso del estado de Chihuahua y en una actitud infantiloide se apropió del escrito como si fuera un juguete y -no te lo doy , no te lo doy, porque yo soy diputada y además tengo una amplia experiencia en los medios de comunicación-, nomás le faltó decir y tú no eres nadie. Lo que repitió y sustento constantemente fue - eres un fracasado-. Pensé. Ya. Valió. Grillo.
Como están las cosas, con un gobernador mentiroso, que cobra foto multas y que se reja de la promesa a los estudiantes universitarios, con un presidente que le parte el alma al pueblo con el gasolinazo, con un peje que solo Dios sabe y ahora con el Trump, dije, hay muere. Pero resulta que me contestan del congreso que van analizar mi propuesta, bueno pues dentó de tantas fregaderas, al menos hay una luz al final del camino, ahora a ver si no me la cortan, -La Luz-
La propuesta es la búsqueda de la verdad. El concepto de verdad histórica es un concepto doble, formado por dos términos muy cargados que producen una cierta inquietud y que, de inmediato, nos sitúan ante el abismo de una larguísima tradición filosófica. Son Palabras graves, densas, abismáticas, palabras que marean y producen como una cierta sensación de vértigo. Pero sucede que el análisis debe ocuparse precisamente, de este tipo de cosas, de las cosas problemáticas, de las cuestiones más delicadas y espinosas, ese tipo de cuestiones que no tienen fácil respuesta y que en muchas ocasiones pueden obligarnos a arrojar la toalla.
–Manuel Canga-
Algo pasa con mi México querido, como que estamos llegando a un límite, un límite en el que no van a poder parar al pueblo que está realmente enojado, tantas tragedias de muerte desde lo de Ayotzinapa y la violencia extrema en que vivimos, he decido llevarme la fiesta en paz, pero al menos desde mi trinchera de ciudadano común intentare siempre alcanzar el bien común, a ver qué pasa con esta propuesta que transcribo nuevamente, de pronto me pregunto.
¿Qué no andaré mal?
Petición de la Compañía Artística y Cultural de Claro Franco al Honorable Congreso del Estado de Chihuahua:
1.- Que la comisión de Educación y Cultura ponga atención a la pifia educativa que durante décadas todas las instituciones educativas del estado y del país han estado cometiendo históricamente en el tema de la música tradicional y oriunda del estado de Chihuahua.
2.- Como parte de esta acción se deberán implementar los mecanismos necesarios para iniciar los trabajos de investigación análisis y sustento de este supuesto.
3.- Se les han entregado ya, a los coordinadores de algunos partidos y de las áreas jurídicas el libro –Los Norteños no son de Chihuahua- en el que se destapa este lamentable evento de pifia en educación.
4.- Les suplicamos a los diputados y coordinadores que por favor lean esta información.
5.- Suponemos que en caso de que nuestra hipótesis tenga sustento y los científicos y estudiosos del Honorable Congreso del Estado de Chihuahua lleguen a considerar que esta falta ha generado una grave falta que durante décadas, en los programas educativos desde kínder hasta universidad sigan engañando a nuestros niños y jóvenes y haciéndolos creer que la música de Norteños -Acordeón y Bajosexto- es la tradicional y oriunda del estado de Chihuahua, deban entonces considerar la posibilidad de establecer un exhorto a la Secretaria de Educación de la nación y a la local para que revisen y hagan los ajustes necesarios para esclarecer esta mentira educativa.