Chihuahua, Chih.- Durante la etapa de Alejandro Villarreal Aldaz al frente de la secretaría general de la Sección 8 del SNTE se asignaron de forma fraudulenta 15 claves de las más altas sin concurso previo, las cuales generaron un boquete a las finanzas públicas de 359 mil pesos mensuales. Así lo sacó a la luz con nombres y apellidos el director ejecutivo de Servicios Educativos del Estado de Chihuahua, Manuel Arias Delgado, quien afirmó que sin contar ni con escalafón horizontal ni vertical entraron como soldados rasos y salieron como generales 15 personas, entre ellos el propio Alejandro Villarreal y su esposa, Zayram Yaleth Delgado González.
Manuel Arias manifestó que si bien en SEECh hay un letrero que dice "Maestro ésta es tu casa", por los hechos que han tenido conocimiento desde su llegada a la institución "SEECH era la casa de un grupo que se estaba beneficiando de este tipo de renglones y este tipo de situaciones de carácter económico".
Afirmó con nombres y apellidos que se entregaron las claves más altas en educación sin concurso previo, para favorecer a 15 personas "que habiendo entrado como soldados rasos, salieron como generales", sin tomar en cuenta las reales necesidades por ejemplo de la Universidad Politécnica Nacional, la Escuela Normal Experimental de Parral, la Normal Rural de Saucillo, ...
"Los beneficiados fuera de norma, fuera de ley, de esa C17, fueron: Ana Aidé Talavera Ordóñez, Guerrero Moya Medina, Fernando Monje Quezada, Raúl Rascón González, Lizeth Regalado Martínez, Ana Elsa González Orozco, Mario Duarte Díaz de León, Jesús Ricardo Martínez Cardiel, Juan Campos Gutiérrez, María Antonieta Mendoza Mendoza, Alejandro Villarreal Aldaz, , Zayram Yaleth Delgado González (esposa de Villarreal), Ottoniel Soto Cervantes, David Ernesto Suani Muñoz y Adrián Dozal Dozal", relató Arias Delgado.
El dirigente de SEECH denunció que estos recibieron las claves sin contar con "escalafón ni horizontal ni vertical, ni bajo los procedimientos normativos del Servicio Profesional Docente", generando boquetes presupuestales en educación preescolar, primaria y secundaria.
"Es un acto de daño patrimonial a Servicios Educativos del Estado de Chihuahua y por ende a los niños y niñas que están siendo atendidos" por el sistema educativo de Chihuahua, apuntó, reiterando su compromiso de que los Servicios Educativos del Estado de Chihuahua sean en esta nueva etapa la casa de los cerca de los 48 mil trabajores de la educación con techo administrativo en la institución y no sólo unos cuantos.
