Chihuahua, Chih.- El titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, Néstor Armendáriz, aseguró que para la CEDH Rosario Piedra Ibarra es la titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, si bien lamentó profundamente la forma en la que se realizó el proceso de designación pues cree que deslegitima en buena medida el papel de los organismos derechohumanistas, por lo que consideró necesario realizar bien las cosas para evitar consecuencias como ésta. De igual modo, señaló, ante la conformación de un bloque de gobernadores del PAN que de antemano anuncian no atenderían las recomendaciones de la CNDH, que de hacerlo no incurrirían en un desacato, pero sí, como con cualquier otra recomendación no atendida, serían objeto de una sanción.
El titular de la CEDH consideró que para ellos Rosario Piedratomó protesta y entró en funciones el pasado 15 de noviembre "por lo tanto estaremos entablando las relaciones instituciones institucionales correspondientes, respeto, insisito, cualquier postura contraria " y estarán atentos a que si alguien promueve algún tipo de recurso y una resolución en diferente sentido también lo estarían acatando.
"Por lo pronto ella está en funciones y es con quien estaremos entablando las relaciones de coordinación todo eesto en beneficio de la ciudadanía", enfatizó Armendáriz, precisando que ni tan siquiera se estaba cuestionando el perfil de Rosario Piedra sino el proceso en el Senado que concluyó con su elección.
Respecto a la intención de algunos gobernadores panistas de no acatar las resoluciones de la CNDH, Armendáriz recordó que las CEDH son organismos autónomos y si hubiera una reacción en ese sentido a ellos no tendría por qué afectarle.
Al mismo tiempo, aclaró que no se podría considerar "desacato" como tal el hecho de que un gobernador no atendiera una recomendación de la CNDH, informando que, sin embargo, como en cualquier otro proceso ello sí les comportaría una sanción.
Sin querer entrar de lleno a si sería partidario o abogaría por reponer el proceso, Néstor Armendáriz aseguró que era partidario de hacer las cosas bien para no afectar la legitimidad de las Comisiones de Derechos Humanos.
